¿Qué es el autocuidado?
Mi propuesta de ideas para practicar el autocuidado:
1.Meditar.
Sentándote solo 10 minutos a meditar te regalas un momento de calma y de estar aquí y ahora solo para tí. Vacías el cerebro del ruido mental diario y como me gusta verlo » pones el contador a cero». Si quieres saber más sobre esto, sobre como comenzar y establecer tu práctica de meditación, te recomiendo mi post sobre porqué meditar y mi guía para comenzar a meditar.
2. Salir a caminar.
Salir a tomar el aire, a despejar la mente y mover el cuerpo, que te de el sol un rato ya te sube el ánimo y te despeja.Proponertelo como tarea semanal, aprovechar los sábados por la mañana o como mejor te venga. Salir a darle una vuelta al barrio, a dar un largo paseo por el parque, o si tienes cerca un paraje natural.
3.Pasar tiempo en la naturaleza.
Si la tienes cerca, tienes un tesoro, te da el oxígeno (y no solo físico) y la calma para fluir en tu día a día. Si por el contrario vives en una ciudad como yo y no tienes cerca ningún paraje natural o no tienes la facilidad para acercarte, cualquier parque puede servir. Y si sales a caminar un rato por un paraje natural conseguirás la mezcla perfecta para desconectar del estrés.
4.Tener una planta y cuidar de ella.
Las plantas en casa son perfectas para traer un poco de esa calma natural a tu día a día. No solo sienta bien cuidarla y mola verla crecer sino que alegra el ambiente y le da «vidilla».Cuidar de una planta, aunque con sus cosillas a tener en cuenta, es muy gratificante y sencillo.
5.Hacer ejercicio.
Tanto si sales a correr, haces yoga, bicicleta, nadar o lo que sea. La clave está en sudar un poco y moverse. El ejercicio libera endorfinas que te van a dejar después de la ducha, en la gloria. De igual manera que pensamos en cuidar de nosotros con una alimentación sana y con una rutina de meditación, cuidar del cuerpo moviéndolo es igualmente necesario.
6.Beber más agua.
Parece una tontería, pero proponerte estar más hidratado te va a hacer que te encuentres mejor. Reduce los dolores de cabeza, la congestión e inflamación y es totalmente necesario para el funcionamiento normal de la mente.
7.Disfrutar de una buena taza de te o café en tranquilidad.
No me refiero a la taza de café que te tomas mientras vuelas por la mañana antes del trabajo. Esta es una taza de té o café que te preparas en un momento en el que la vayas a poder disfrutar plenamente. A mí me gusta especialmente un buen te por la tarde cuando me voy a parar a leer un rato, o el café de los sábados por la mañana, disfrutando de la calma de mi casa.
8.Cocinar un plato casero con ingredientes frescos.
Tanto si quieres pasarte la tarde entera en la cocina, como si solo tienes media hora, prepararte un plato hecho con ingredientes frescos y de calidad, calma y cariño, te va a sentar maravillosamente bien. Si no tienes mucha mano con la cocina, o no te animas, te recomiendo comenzar por este post sobre como comenzar a cocinar, y mi receta de sopa de miso con verduras y tofu. Facilísima, y reconstituyente.
9.Ordenar tu espacio.
Esto es algo que en apariencia puede no parecer tan obvio para cuidar de ti y sentirte mejor. Pero, si lo piensas bien, un espacio desordenado y sucio no nos hace sentir bien.Abrir las ventanas y ventilar, ordenar un poco y barrer, poner una esencia o incienso… Dejar nuestro espacio físico ordenado y limpio al menos a mí me da el espacio mental necesario para dedicarme a otra cosa. Por no hablar de que visualmente es mucho más motivador…Personalmente el desorden me da sensación de «ruido mental» que me impide relajarme y sentirme agusto plenamente en mi espacio (que no quiere decir que lo tenga todo siempre perfecto jajaj, ya me gustaría!)
10.Bailar ( y cantar!)
Tanto si se te da bien como si no, si eres de los que tiene dos pies izquierdos o de los que te aplauden los vecinos cuando cantas, ponerte una música que te guste y moverte al ritmo mientras haces algo en tu casa es una forma magnífica de mover el cuerpo y generar endorfinas. A mí me encanta ponerme música para limpiar y para cocinar. Mi rutina de entre semana suele incluir una sesión de puesta a punto de mi casa con música . Y me encanta cocinar al ritmo de unos buenos temazos. Si he tenido un buen día lo refuerzo y si no ha sido así cambio el chip.
11.Leer.
Y no me refiero a leer algo en el móvil y hacer una sesión de scroll infinito. Me refiero a pararte un rato a leer algo que te guste. Tomarte un rato para desconectar del mundo y disfrutar de la lectura. Tanto si es un libro de contenido denso, como si es una novela, leer te aporta un rato de tranquilidad en la que sumergirte durante él y olvidarte del mundo exterior.
12.Preparar una sesión de spa casero.
Prepárate una sesión para cuidar de tí en casa. Piensa en aquellas cosas que te hacen sentir bien físicamente: Una buena ducha caliente, depilarte, hidratarte, arreglarte las uñas, ponerte una mascarilla….
13.Encender una vela y ponerte una esencia o incienso mientras haces algo.
Las velas e inciensos o esencias le aportan un toque de calidez especial a tu momento. Ponerse una vela, no solo para decorar, sino para utilizarla, sin esperar a que llegue el momento especial para usarla. El momento especial es ahora. A mí me gusta mucho especialmente cuando me siento a leer o escribir en el blog. Me ambienta en el relax que asocio a los momentos de meditación y me da calidez.
14.Crear una rutina de mañana y de noche que se adapte a tí y tus necesidades.
No podemos controlar como va a ser el día, pero lo que sí podemos cuidar es como lo empezamos y terminamos.Piensa en las cosas que idealmente harían mejor tu mañana o tu noche, ya sea acostarte antes, leer un rato, meditar, desayunar con calma…etc y establece una rutina para mejorar tu día a día.
15.Escribir.
Llevo desde los 12 o 13 años escribiendo en prácticamente cualquier superficie y te puedo asegurar que es una forma genial de reflexionar sobre tus cosas. Expresar cómo te sientes sin presión de que nadie te juzgue, aclarar tus ideas, etc. Si no se te ocurre qué puedes escribir ya que no tienes costumbre y no sabes por donde comenzar, puedes centrarte solo en escribir de forma diaria un breve resumen de cómo ha ido tu día, y una cosa por la que des las gracias.
16.Hacer de la gratitud una parte más de tu día.
Puedes hacerlo de muchas formas entre ellas parándote a escribir en una libreta las cosas por las que te sientes agradecido en el día. Pero también puedes convertirlo en un recordatorio visual de la cantidad de cosas por las que puedes estar agradecido en tu vida de la siguiente manera: Prepara un tarro y cada día en un papel pequeño escribe al menos una cosa por la que te sientas agradecido, pueden ser tan sencillas como «el café de esta mañana» a «la charla que he tenido con x» y ve guardándolos en el tarro. Al final de un mes puedes ver claramente que hay un montón de cosas por las que estar agradecido. Imagina cuantas puedes acumular en un año entero.
17.Planear tu semana.
Sin duda para mí es no solo una herramienta de autocuidado sino de crecimiento. Sin objetivos imposibles, planificar lo que quieres hacer durante la semana, estableciendo objetivos saludables de crecimiento personal es la mejor manera de motivarte y también de hacer seguimiento de tus progresos.
Yo me siento los domingos por la tarde a reflexionar sobre la semana que se va y pensar qué necesito hacer durante la semana que está por llegar, qué me gustaría hacer o conseguir y lo establezco en objetivos de la semana que después distribuyo a lo largo de la misma en mi agenda. De esta forma, cuando llega el día no lo dejas pasar en un «ya lo haré mañana» o «no se qué hacer esta tarde». Sabiendo lo que te has propuesto para el día es más fácil que lo cumplas. Si por ejemplo te has propuesto hacer ejercicio 3 veces a la semana y es jueves y no te has puesto aún, puede motivarte a hacerlo el resto de días que te quedan por delante.
Hay un dicho que describe muy bien esto: «no puedes mejorar lo que no mides» Por ejemplo si no «mides» cuantas veces te sientas a leer, no puedes saber si necesitas mejorar tu habito de lectura.
18.Llamar a un amigo y charlar.
Algo tan sencillo como llamar a un amigo o un ser querido con el que hace un tiempo que no hablas. Os ponéis al día, fortalecéis esa amistad, os reís y sobretodo demuestras que te importa.
19.Aprender sobre algo que te inspire o a hacer algo que te motive.
Ya sea aprender a hacer ganchillo mediante videos de youtube, a cocinar recetas indias, o aprender un idioma. Invierte tu tiempo en eso sobre lo que siempre te ha apetecido saber más o que siempre has querido saber hacer. Hoy en día gracias a internet el conocimiento es extremadamente fácil (y en muchísimas ocasiones gratuito) de conseguir.
20.Apagar el movil o dejarlo en silencio unas horas.
Si no puedes apagarlo del todo, prueba a dejarlo en modo «no molestar» con llamadas prioritarias durante unas horas; de manera que si alguien de tus contactos más queridos te necesita te enteres igual. De esta forma consigues no estar pegado al movil, que tanto nos conecta y a la vez nos desconecta. Si en lugar de prestarle atención todo el rato a una pantallita y sus notificaciones, inviertes ese tiempo en estar presente en cualquiera de las ideas anteriores, créeme que te sentirás mejor. No me malinterpretes, chatear con tus amigos está genial y echar el rato en las redes viendo las novedades casi también, pero a veces dedicar tu tiempo libre a algo que realmente te aporte un valor para el futuro (aunque sea inmediato) te sienta mejor.
Espero que mi listado te haya gustado, ¿se te ocurre alguna actividad que añadirle? si es así, o quieres contarme como practicas tú alguna de las que ya propongo, hazmelo saber en comentarios, o en Instagram en @meditandoentrefogones